Las longitudes de onda de 630 nm, 660 nm, 810 nm, 830 nm y 850 nm tienen efectos claros en el crecimiento capilar, pero sus niveles y mecanismos de acción son ligeramente diferentes, conformando en conjunto un esquema de fototerapia capilar muy completo y eficaz. En resumen, se trata de una potente combinación de "reparación superficial + activación profunda". Estas son las funciones específicas de cada longitud de onda:
La terapia con luz roja mejora la salud de la piel, aumenta la energía celular y acelera la curación para lograr una apariencia juvenil y revitalizada y un mejor bienestar general.